Las producciones audiovisuales en torno a la demencia, y en especial el Alzheimer, ayudan a dar visibilidad a una enfermedad que en muchas ocasiones está oculta, delimitada por las vidas de los que la padecen, sus familiares, y su entorno más cercano. Pero la sociedad en general también debe estar concienciada de una enfermedad que cada vez afecta a más gente, para así favorecer los programas de ayuda y apoyo.