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Cuidadores es el nombre del documental que Oskar Tejedor,  director y guionista guipuzcoano, presentó en 2010. Un proyecto que busca dar voz a todos aquellos familiares – esposas, hijos, maridos – que  dedican su vida a mejorar el día a día de un ser querido, o simplemente a hacer que ese día a día sea posible.

Hay una pregunta que acompaña al título del documental: ¿Cómo te gustaría que te cuidaran? Para intentar darle respuesta han sido necesarios cuatro años de trabajo. De esos cuatro años, uno y medio en el que se han recopilado muchas horas de grabación, que dan como resultado 90 minutos del documental Cuidadores.

Los protagonistas son Alicia, Carlos, Ana, Naiara, Txus, Maribel y Manuel. Son las personas que han compartido con Oskar sus sesiones de terapia en Afagi, asociación guipuzcoana de familiares de enfermos de Alzheimer de Gipukoa, y aunque sus historias tienen puntos en común – la soledad, la incomprensión de la sociedad, la pérdida de su propia vida – se diferencia el grado en el que la enfermedad  afecta a la persona.  Para Oskar no era lo mismo mostrar el inicio, marcado por la desorientación, que cuando la persona ya lleva un tiempo en casa, o el paso en el que se hace necesario utilizar recursos como residencias o centros, hasta llegar a la fase terminal, o incluso al duelo (en palabras de una de las protagonistas, visto como una liberación, lo que aumenta el sentimiento de culpabilidad).

Para Oskar este proyecto también ha sido una liberación personal, como se puede adivinar por la dedicatoria del documental “A mi padre, y a su heroína, mi madre”. Haber vivido tan de cerca un caso de demencia y el papel tan importante que cumple una persona dedicando 24 horas al día a su cuidado, ha facilitado el acercamiento a los protagonistas de Cuidadores. Tenía mucho que compartir con ellos, algo necesario para que la cámara pudiese mostrar la realidad intentando no interferir en ella, durante un periodo de tiempo tan largo pero necesario para mostrar la evolución física y emocional.

El deseo de Oskar es que su trabajo pueda servir para que la voz de estas personas sea más escuchada en la sociedad – y que sus demandas para un cambio de la Ley de Dependencia puedan tener respuesta – y, por qué no, que el documental sea una guía para todos aquellos que en cualquier momento podamos tener que desempeñar el papel de cuidadores.