Una semana más seguimos hablando de nutrición. Esta vez es Laia Casado, logopeda, la que nos habla y da unos consejos para mejorar la alimentación de pacientes con problemas o dificultades para tragar alimentos.
La logopedia se encarga de la prevención, evaluación y tratamiento de la disfagia, que es la dificultad o imposibilidad para tragar, es decir, se produce cuando tenemos dificultades en el proceso deglutorio.
A veces tras un Accidente Cerebrovascular (ACV) o a raíz de enfermedades como Parkinson, es posible que aparezcan problemas a la hora de deglutir correctamente los alimentos. Esto es debido a que son trastornos que afectan al correcto funcionamiento de los nervios y musculatura de los órganos implicados en este acto.
La función del logopeda consiste en acercar lo máximo posible al paciente a una alimentación oral con una deglución segura, manteniendo una hidratación y nutrición adecuadas.
Un trastorno de este tipo condiciona la calidad de vida del usuario. Las consecuencias van agravándose a lo largo que avanza la enfermedad, y suelen conllevar: tos, atragantamiento, dificultad para ingerir cualquier tipo de alimento (tanto sólidos como líquidos), babeo, aumento del tiempo invertido para comer, pérdida de peso, mala nutrición y deshidratación.
La deglución es el acto de pasar el alimento desde la boca a la faringe.
Podemos utilizar técnicas basadas en mejorar la movilidad de los órganos y musculatura implicados en la masticación, control de la postura del usuario, cambios en el volumen y textura del bolo alimenticio, aumentar la sensibilidad y lograr el control de forma voluntaria de la movilidad orofaríngea.
Existen algunas maniobras más específicas para la facilitación de la deglución como pueden ser la maniobra de Mendelsohn, la resistencia frontal, la deglución forzada…
Depende de muchos factores: la edad del paciente, el nivel de disfagia al que nos enfrentemos, el motivo de la disfagia, la colaboración familiar… No se puede generalizar, hay casos en los que se logrará una rehabilitación completa o muy próxima a ella y en otros casos se les dotará de herramientas para tener una deglución segura y lo más normalizada posible.
En primer lugar que acuda a un especialista para asegurarse de qué tipo de alimentación puede tener, y a partir de ahí hay algunos consejos prácticos que puede seguir:
- Debe de estar sentado, en ángulo recto e inclinando un poco la cabeza hacia delante a ser posible.
- Hay que evitar las distracciones y concentrarse sólo en el acto de comer.
- Darle cantidades pequeñas de comida y evitar agua y sólidos difíciles de masticar (existen espesantes para los líquidos)
- Darles tiempo para comer, deben de comer despacio.
- Tener paciencia.
Se pueden hacer también ejercicios para mejorar la musculatura de la zona, por ejemplo:
- Abrir y cerrar la boca varias veces.
- Sacar la lengua y moverla derecha-izquierda y de arriba-abajo.
- Poner morritos como si fuera a tirar un beso.
- Estirar las comisuras de los labios hacia atrás, como si sonriera.
- Imitar la masticación de un chicle moviendo así toda la musculatura de la boca.
Como en cualquier rehabilitación la actitud tanto del logopeda como de la persona es fundamental.
A veces te encuentras con pacientes desmotivados o cansados, creo que una actitud positiva, alegre y animada por parte del terapeuta es muy importante, además de la paciencia.
Una sonrisa, un gesto cariñoso, una “broma” personal, creo que esos pequeños detalles hacen que el paciente se sienta más cómodo y por lo tanto la terapia sea más productiva.
Nunca podemos olvidarnos que estamos trabajando con personas adultas, personas que han perdido capacidades que les restan autonomía, con lo que eso conlleva en el estado de ánimo, cada paciente es único y debe ser tratado como tal.
Al ser un problema derivado de un accidente cerebrovascular o enfermedades degenerativas es difícil hacer una prevención específica de la disfagia, quizá la mejor prevención es la de la propia enfermedad o ACV.
Puedo recomendar estas dos guías sobre la disfagia y pautas para tratarla y un vídeo para que se vean más claramente las técnicas aplicadas.
Guía para el manejo de la disfagia. Pautas para personas con problemas de deglución
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